Los resultados del Reino Unido en PISA y otras evaluaciones internacionales siguen siendo buenos, aunque han empeorado ligeramente en los últimos años. Además, el país cuenta con una educación superior muy prestigiosa y los datos del estudio Education at a glance de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) lo sitúan entre las diez naciones más cultas del mundo. Pero, ¿tiene de hecho algo que ver en el nivel cultural británico su sistema educativo? Analizamos sus principales características y destacamos las diez claves de la educación en el Reino Unido para tratar de descubrirlo.
DIEZ CLAVES DE LA EDUCACIÓN BRITÁNICA
- 1. La educación es obligatoria y gratuita. La educación reglada va desde los 5 hasta los 16 años, aunque la mayoría de los estudiantes continúa hasta los 18 años. La primaria va de los 5 a los 11 años y la secundaria de los 11 a los 16 años (de los 12 a los 16 años en Escocia). Hay centros independientes privados de pago, pero todos los alumnos del Reino Unido pueden acceder a una educación gratuita de alta calidad.
- 2. Existen leves diferencias entre el sistema educativo de Escocia, Inglaterra, Irlanda del Norte y Gales. Aunque la estructura educativa y los contenidos son similares en todo el país, Inglaterra y Gales siguen el Currículo Nacional, actualizado en 2014, que da pautas y especifica las asignaturas que deben cursarse entre los 5 y los 16 años y que se aplica en los centros escolares públicos. Los centros independientes, de gestión privada, están sujetos a inspecciones de forma regular, ya que no tienen que seguir el Currículo Nacional al detalle, pero deben demostrar que ofrecen una formación completa y adecuada. El Currículo de Irlanda del Norte es una adaptación del Nacional. En Escocia tienen su propio Currículo para la Excelencia, que se implantó en el curso 2010-2011 y cubre desde los 3 hasta los 18 años.
- 3. En la secundaria se da libertad de elección de asignaturas a los alumnos. Durante los primeros cursos el Currículo establece un amplio número de asignaturas, todas ellas obligatorias, que van adaptándose en cada nivel. Sin embargo, a partir de los 14 años, los alumnos se preparan para los exámenes nacionales (GCSE o CSE en Escocia) y estudian tres materias comunes (Inglés, Matemáticas y Ciencias) y otras opcionales, a escoger entre múltiples temas: Informática, Educación Física, Educación cívica, Artes, Diseño y tecnología, Humanidades, Lenguas extranjeras… Los estudiantes pueden llegar a examinarse de un mínimo de 5 asignaturas o de hasta 10 o 12 materias, dependiendo de sus habilidades y elecciones. Después, deben escoger de nuevo entre seguir la formación académica, que les llevará a acceder a la universidad, u optar por la formación vocacional, más práctica y centrada en el acceso al trabajo.
- 4. Se apuesta por la creatividad, la autonomía y la interactividad. Se da al alumno libertad para que innove, experimente con sus propios medios y despliegue su creatividad en el aula. Son habituales la investigación, tanto de forma individual como colectiva, el trabajo colaborativo y la realización de proyectos. También se valora la interactividad en clase y el profesor anima al alumno a que exprese sus ideas ante sus compañeros y participe en actividades, debates o concursos. El objetivo es que el aprendizaje implique directamente a los estudiantes y tenga un componente de diversión.
- 5. Se favorece la documentación y la investigación y se persigue el plagio. Reino Unido cuenta con algunas de las mejores colecciones documentales digitalizadas sobre todo tipo de temas (arte, cultura, medios de comunicación, historia, ciencia, sociedad etc.) y pone sus archivos a disposición de sus alumnos de forma gratuita y abierta, para que los utilicen en sus investigaciones y proyectos. Se trata de una fuente de información extensa y muy útil, especialmente para alumnos de secundaria y universitarios. En esta misma línea, se da mucha importancia al respeto al autor y su obra, por lo que el plagio está muy castigado y puede significar el suspenso de la asignatura.
- 6. La inversión en educación está por encima de la media europea. La inversión en educación en Reino Unido ha ido creciendo exponencialmente hasta alcanzar un 6,15% del PIB en 2010. Los datos oficiales más recientes, proporcionados por Eurostat y correspondientes a 2011, sitúan el porcentaje de inversión en educación en Reino Unido en un 5,98% del PIB (frente al 5,25% de la media de la Unión Europea o el 4,82% de España, por ejemplo).
- 7. Un alto porcentaje de la población continúa estudios de secundaria postobligatoria, cerca del 50 % va a la universidad y la alta formación repercute en los sueldos. Un alto porcentaje de la población británica completa estudios de secundaria postobligatoria académica o vocacional: un 78 % de los adultos de entre 25 y 64 años de edad (el 80% de los hombres, el 76 % de las mujeres) han terminado la educación media superior, frente al 75 % de la media de la OCDE; en la población joven el porcentaje supera el 90 %. El acceso a la universidad se sitúa cercano al 50 %, aunque los datos descubren que una de cada dos jóvenes británicas tiene una titulación universitaria. Además, el 43 % de las mujeres terminan la educación superior, frente al 41 % de los hombres. El nivel formativo se traduce, posteriormente, en una gran diferencia en cuanto a sueldos: un adulto sin educación media superior gana un 70 % de lo que percibe alguien que sí cuenta con esta formación. Esta tasa es una de las más altas entre los países de la OCDE.
- 8. El nivel académico de la educación superior es muy bueno. Un estudio publicado el año pasado por la editorial Pearson señala que Reino Unido mejora mucho en el ranking de resultados educativos si se tienen en cuenta los datos de la educación superior. La alta calidad de estos niveles educativos atrae a muchos estudiantes internacionales que acuden al país para cursar estudios superiores (un 17 % del total de estudiantes son extranjeros), lo que a su vez contribuye a mejorar el nivel educativo, económico y cultural de Reino Unido.
- 9. La Educación sexual y la Religión son asignaturas obligatorias, aunque se respeta la decisión de las familias. El Currículo Nacional de Inglaterra y Gales establece una asignatura de Educación sexual y afectiva y otra de Religión que se imparten obligatoriamente en todos los centros estatales desde los 11 años, aunque no tienen que evaluarlas. En el caso de la Educación religiosa, las escuelas estatales deben seguir el plan de estudios que establece la autoridad local correspondiente, quien vela para que la asignatura sea representativa de las creencias mayoritarias de la región.
En cualquier caso, las familias tienen derecho a retirar a sus hijos de esas clases si no quieren que las cursen. En Educación sexual sí hay una parte obligatoria, para todos los alumnos, que generalmente se enmarca en la clase de Ciencias. En Escocia existen también dos áreas del Currículo obligatorias: Educación moral y religiosa y Salud y bienestar (donde se incluye un apartado de ‘Relaciones, salud sexual y paternidad’). - 10. Se utiliza uniforme en casi todos los centros escolares. El uso del uniforme escolar está extendido en la mayoría de las escuelas, ya sean privadas o públicas. El objetivo de esta práctica es fomentar la identidad de cada escuela y el orgullo de pertenencia al grupo, promover la disciplina y asegurar que todos los niños se sienten iguales e integrados sin sufrir presiones sociales por el tipo de vestimenta. Cada centro escolar escoge el suyo, aunque suelen ser similares, y se tiene en cuenta su precio asequible, y que no resulten discriminatorios por sexo ni ofensivos hacia ninguna creencia o religión.